Las enzimas alimentarias constituyen el segmento más grande de las enzimas industriales con una facturación en torno a 1 billón de euros con un crecimiento anual de alrededor de un 10%. Dada la gran gama de enzimas que se utilizan en la industria alimentaria y el rol de la profesión veterinaria como tecnólogos de alimentos y agentes de control oficial, se hace necesario expandir el conocimiento en esta área