La Organización Colegial Veterinaria manifiesta su preocupación ante la posible apertura de dos nuevas facultades de veterinaria en España, donde ya existen doce

Los Presidentes de los Colegios Veterinarios de España, en la asamblea general celebrada el pasado día 5 de julio en Madrid, manifestaron su inquietud por la eventualidad de que en breve se creen dos nuevas Facultades: una en Alicante (privada) y otra en Lleida (pública), que se sumarían a las 12 existentes (9 públicas y 3 privadas).

En el transcurso de la asamblea, se puso de manifiesto cómo son las Comunidades Autónomas las únicas instituciones habilitadas por ley para autorizar la creación de títulos y nuevos campus universitarios.

La singularidad española –que comparte Portugal- reside en que en la Unión Europea ningún país de referencia (Alemania, Reino Unido, Francia, Holanda, Austria, Suiza y países escandinavos) ha permitido la creación de centros privados (es decir, sin limitación de entrada de alumnos) de formación veterinaria.

Las autoridades europeas otorgan gran importancia a la Veterinaria por su directa relación con la salud pública y la seguridad alimentaria, razón por la que supervisan la formación que se imparte en las Facultades y existe un sistema único de acreditación a nivel europeo para garantizarla.

En la asamblea de presidentes se constató cómo en la actualidad los egresados de las Facultades (alrededor de 1.500 al año) encuentran muy serias dificultades en su camino laboral y cómo la profesión sufre las consecuencias de la crisis económica (si no con una alta tasa de desempleo, sí con empleo precario). A pesar de ello, la demanda por seguir estos estudios no mengua debido al carácter vocacional de las carreras sanitarias (Medicina, Veterinaria, Farmacia, Enfermería).

Respecto al proyecto de crear un título en Alicante el próximo año, la profesión se pregunta si procede una tercera Facultad en la Comunidad Valenciana.

El proyecto de Facultad en Lleida, a partir de los estudios de Ciencia y Salud Animal recientemente implantados, responde a una reivindicación histórica local y a las dificultades surgidas con la reserva de 30 plazas anuales de formación complementaria en la Facultad de Veterinaria en la Universidad Autónoma de Barcelona para aquellos estudiantes que aspiran al Grado.

La Organización Colegial Veterinaria ha decidido insistir ante las autoridades políticas y académicas que proceda sobre la inconveniencia de estos proyectos, y pedir a la Federación Europea de Veterinarios que estudie el problema y se pronuncie sobre el mismo.