Las competencias de los veterinarios deben considerarse una parte esencial e integral de la salud en general. Los veterinarios desempeñan un papel fundamental en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades animales, lo que ayuda a prevenir la propagación de zoonosis que pueden afectar a los humanos. Además, su trabajo es esencial para garantizar la seguridad y la calidad de los alimentos de origen animal, desde la granja hasta la mesa.
En el contexto de la pandemia de COVID-19 y otras crisis sanitarias, los veterinarios también han demostrado su importancia al colaborar en la vigilancia epidemiológica, la investigación de enfermedades emergentes y la preparación para crisis sanitarias.
El alcance del trabajo de los veterinarios a menudo permanece invisible para la sociedad, pero proteger y mejorar la salud de las personas y sus comunidades es una parte esencial de la profesión veterinaria.
La profesión veterinaria, por la variedad e importancia de sus competencias e intervenciones, está considerada un `bien público mundial´, según la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), como actividad que beneficia a todos los pueblos y generaciones venideras.
Los veterinarios, en definitiva, son actores fundamentales en la promoción de la salud global al abordar las interacciones entre la salud animal, la salud humana y el medio ambiente. Su experiencia y conocimientos son vitales para afrontar los desafíos de salud pública en un mundo cada vez más interconectado.
En el Día Mundial del Veterinario 2024, queremos reconocer y agradecer el compromiso y la dedicación de nuestros profesionales en la promoción de la salud y el bienestar de los animales, los humanos y el planeta en su conjunto.
