Desde las 11 de la mañana, l@s colegiad@s y familiares comenzaron a llenar todas las salas de los cines del Centro Comercial Palacio del Hielo de Madrid, donde fueron recibidos por miembros de la junta de gobierno y del departamento de comunicación del Colegio de Veterinarios de Madrid y un nutrido grupo de voluntarios de Cruz Roja Española, entidad a la que iba destinado el donativo de 2 euros por entrada que aportaba cada asistente.
La vicepresidenta de COLVEMA, Ana Pérez Fuentes (en el centro de la imagen), posa con algunos de los voluntariuos de Cruz Roja
El evento comenzó con la proyección de las películas “Wonka” y Migración: una aventura patas arriba', que se han convertido en el éxito de estas navidades y de las que el Colegio de Veterinarios de Madrid ofrecía un pase en exclusiva para sus colegiad@s. Para poder hacer el evento del agrado de más colegiados y edades de sus acompañantes, este año se podía elegir entre una película u otra.
Los más pequeños se decidieron por Migración: una aventura patas arriba’
Las salas estaban todas abarrotadas y las películas hicieron las delicias de grandes y pequeños.
Los más mayores prefirieron ver la película "Wonka", uno de los grandes éxitos de estas navidades
Tras finalizar ambas proyecciones, todos los asistentes prorrumpieron en un largo aplauso, lo que corrobora un año más el éxito de este evento social que organiza el Colegio de veterinarios de Madrid.
Los voluntarios de Cruz Roja, entregaban a cada niñ@ una bolsa de golosinas, además de las palomitas y el refresco que se servía de manera gratuita en las barras de los cines, para todos los asistentes.
Los voluntarios de Cruz Roja Española, se encargaron durante toda la mañana de realizar divertidos talleres infantiles, que hicieron las delicias de los más pequeños.
Los talleres de manualidades fueron de los más demandados por l@s niñ@s que hicieron tarjetas de navidad, señala libros y originales dibujos
El ya tradicional "pinta-caras" fue una de las actividades "estrella" de los más pequeños de la familia.
Tras finalizar cada proyección y como "fin de fiesta", un famoso mimo ofreció un sorpendente y divertido espectáculo, que despertó el interés de mayores y pequeños.
