El objetivo de la estrategia, que se basa en el trabajo realizado durante muchos años por la Organización para preservar la eficacia de los antimicrobianos utilizados en medicina veterinaria y ayudar a preservar la eficacia de las moléculas utilizadas en medicina humana, es proporcionar a los países las herramientas necesarias para acompañarlos hacia una mejor gestión del problema, independientemente de su situación sanitaria actual