El ponente es Coach Internacional certificado por ICC y por el Center for Executive Coaching (USA) y autor del libro ‘7 claves para dirigir con ÉXITO la Clínica Veterinaria’.
Antes de empezar la conferencia propiamente dicha, quiso compartir con los asistentes a la charla dos premisas:
1. Como seres humanos todos queremos ser comprendidos y aceptados
2. Tu habilidad como dueño/líder de una clínica se mide por lo que son capaces se hacer tus empleados y no por lo que eres capaz de tú.
Después recalcó un concepto clave: "No hay que tener miedo al conflicto, sino a no ser capaces de abordarlo de forma respetuosa y constructiva para crecer personal y profesionalmente gracias a él". La charla se enfocó en esta última opción y se utilizó una historia real llamada “¡Llegas tarde otra vez!” como nexo conector de las herramientas que se explicaron.
La jornada se dividió en tres bloques.
En el primer bloque se trataron las actitudes básicas ante el conflicto. Huir del conflicto o hacerlo personal no son respuestas efectivas. Como decía Miguel Ángel, ante un problema con un empelado tienes tres opciones: las dos famosas “Fight or Flight” (lucha o huye) o Coach (entrena). La charla se centró en cómo entrenarse uno mismo y a su equipo para afrontar las diferencias de forma constructiva.
En el segundo bloque explicó los diferentes tipos de conflicto y su importancia como herramienta de diagnóstico diferencial para reconocer el origen del mismo. Como ocurre en medicina, sin un buen diagnóstico es difícil instaurar un tratamiento adecuado.
En el tercer bloque se explicó el método paso a paso:
Paso 1: Llegar a un acuerdo del motivo de la discrepancia y de porqué es importante corregirla.
Paso 2: Buscar conjuntamente posibles soluciones
Paso 3: Acordar una solución concreta y cuando se implementará.
La charla acabó dando respuesta al caso de “¡Llegas tarde!” siguiendo paso a paso el método explicado previamente.
Los tres beneficios de aprender gestionar de forma el conflicto con nuestros empleados son:
1. Relaciones más sanas y sinceras. ¡¡¡Más paz mental para todos!!!
2. Mejora en la elaboración de tareas y puesta en marcha de protocolos
3. Mejores resultados en la clínica debido a la mejora continua al no ocultarse ya los errores y a usarlos como fuentes de aprendizaje y crecimiento
En resumen, una charla que aportó a los numerosos veterinarios asistentes, herramientas prácticas para ayudar a establecer relaciones más sanas y sinceras entre los miembros de la clínica y como consecuencia de ello, mejorar los resultados que obtienen en su día a día.
