Durante una semana, un grupo de veterinarios recorre las granjas a las que los alcaldes y líderes religiosos les permiten entrar para realizar revisiones y curar a los animales. Para la inmensa mayoría de los ganaderos es la única revisión médica anual de la que disponen sus rebaños. En muchos casos, animales de los que tienen una dependencia absoluta para subsistir.El pasado mes de marzo, un total de 8 profesores de facultades veterinarias españolas partieron con destino a la base española ‘Miguel de Cervantes’ (sector oeste de UNIFIL, sur de El Líbano) para facilitar apoyo veterinario a la cabaña ganadera del sector en el que opera la misión militar española bajo mandato de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como ‘Cascos Azules’. Concretamente, seis profesores pertenecen a la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), que lidera el equipo, y los otros dos docentes forman parte del profesorado de las facultades de Veterinaria de la Universidad de Córdoba y de la Autónoma de Barcelona.
En el extremo derecho, Alberto Díez Guerrier de Colvema y a su lado el Decano de la Facultad de Veterinaria de la UCM, Pedro L. Lorenzo, junto a otros profesores de varias facultades españolas
Librado Carrasco, antiguo decano de la Universida de Córdoba, inició estos viajes hace 10 años, en los que han ido sumando a los profesores de la UCM, especialistas de Zaragoza, Murcia, Cáceres, Valencia, Barcelona y Sevilla, entre otras y se ha formado un convenio con el Colegio de Veterinarios de Madrid.
El apoyo veterinario ha sido solicitado por las Fuerzas Armadas e impulsado y desarrollado por la Conferencia de Decanos de Facultades de Veterinaria de España. Se trata del cuarto desplazamiento de un equipo de veterinarios españoles a la zona bajo el auspicio de la Conferencia, y el decimotercero en el que participan profesores españoles.
Los profesores, que se desplazan a una zona conflictiva con la intención de cooperar, ejercieron labores de veterinaria para ayudar a los ganaderos de una región económicamente deprimida mientras que, además, seirvieron de apoyo civil a las Fuerzas Armadas españolas.
En la base militar, se forman dos equipos de intervención veterinaria que trabajan para mejorar las condiciones generales de los rebaños, fundamentalmente de ganado ovino, bovino y caprino, mediante la intervención directa sobre los animales. Así, buscarán solucionar los problemas que habitualmente presentan, como la mamitis, metritis, parasitosis y realizarán pequeñas intervenciones, entre otras labores.
Como novedad, esta es la primera misión en la que el equipo de profesores españoles ha colaborado en la formación de estudiantes de veterinaria locales. Concretamente, los profesionales ayudarán a los alumnos de la Universidad de Beirut. Otra de las novedades es que contará con observadores veterinarios de las Fuerzas Armadas Libanesas, aumentando de esta manera la colaboración a desarrollar.
El equipo de profesores veterinarios se encargó de ayudar en la mejora del manejo ganadero mediante diagnóstico de gestación en grandes y pequeños rumiantes, así como en el establecimiento de pautas de alimentación racionales. Además, trasladaron a los ganaderos normas básicas de buenas prácticas, mediante reuniones con los mismos.
Del mismo modo, los veterinarios suministraron la medicación que necesitan los animales gracias al desplazamiento de medicamentos por parte de las empresas que han apoyado desinteresadamente la misión. Concretamente, coordinado por Veterindustria y con el apoyo del Consejo General de Colegios de Veterinarios de España y del Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid (Colvema), se trasladarán a El Líbano más de tonelada y media de productos sanitarios.
Por último, cabe señalar que el proyecto tiene una gran acogida por parte de las autoridades locales, ya que ayuda a los ganaderos de una región “económica y sanitariamente muy deprimida”, que soporta unas condiciones de trabajo muy “peculiares” debido a las características geopolíticas del área geográfica.
